Un informe del Banco Mundial y PNUD revela que en América Latina y el Caribe se redujeron los ingresos familiares y se duplicó la inseguridad alimentaria.
La tasa de empleo en los países de América Latina y el Caribe continúa por debajo de los niveles prepandemia. Esto significa que el mundo del trabajo aún no logró recuperarse de los efectos económicos de la propagación del covid-19 en la región y en el mundo.
Según un relevamiento de el Banco Mundial y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), una de cada 4 personas que perdieron su puesto de trabajo durante la pandemia todavía no logró recuperarlo y, cerca del 50% de los hogares sigue sin alcanzar el nivel de ingreso total que tenía previo a la crisis.
El informe, que se titula “Una recuperación desigual: Tomando el pulso de América Latina y el Caribe después de la pandemia”, se realizó sobre la base de encuestas telefónicas de alta frecuencia realizadas en 24 países de la región en forma conjunta entre ambos organismos. Allí se calculó que la tasa de empleo promedio regional sigue 11 puntos porcentuales por debajo de los niveles prepandemia, según publicó la agencia oficial Télam.
Reducción de la PEA
El trabajo del BM y el PNUD reveló que el 60% de las personas que perdió el empleo en este periodo salió del mercado laboral. Esto impactó en una reducción de la población económicamente activa (PEA).
De igual forma, un segmento importante de la fuerza laboral se desplazó de las empresas más grandes y las medianas hacia las micro y pequeñas empresas, que tienen menos productividad.
En conferencia de prensa virtual, la gerenta del grupo de Reducción de la Pobreza y la Desigualdad del Banco Mundial, Ximena Del Carpio informó que alrededor del 24% de los hogares llegó a quedarse sin comida durante la pandemia, con lo que se duplicó la inseguridad alimentaria, según publicó Télam.
Digitalización
Respecto al impacto de la digitalización en las finanzas, los resultados de la encuesta indicaron que el 49% de los hogares aumentó el uso de servicios y transacciones digitales como ser banca móvil y páginas web. “Las billeteras móviles facilitan el acceso a la banca a segmentos alejados de la banca tradicional (personas mayores, con menos educación y poblaciones rurales)”, expresó la economista jefe del PNUD, Marcela Meléndez.
La agenda para salir fortalecidos de esta experiencia debe basarse en mejorar la calidad educativa, en reformas urgentes para favorecer la inversión privada y la creación de empleo formal”.
Carlos Felipe Jaramillo – vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe.
Se explicó que el acceso a internet aumentó significativamente durante la pandemia, y se empezaron a cerrar brechas entre áreas rurales y urbanas (aunque la distancia aún persiste). A su vez, durante la presentación se hizo hincapié en el desafío de reducir las brechas digitales y mejorar la calidad educativa de las grandes mayorías, uno de los principales problemas de la región, que la pandemia puso en evidencia.
“La agenda para salir fortalecidos de esta experiencia, debe basarse en mejorar la calidad educativa, en reformas urgentes para favorecer la inversión privada y la creación de empleo formal y en las oportunidades que ofrece la agenda verde”, concluyó el vicepresidente del BM para América Latina y el Caribe, Carlos Felipe Jaramillo.
