El ministro de Economía, Sergio Massa, iniciará esta noche un viaje a China, que implica visitar Shanghái y Beijing, donde buscará la ampliación del acuerdo para usar yuanes en el comercio bilateral.
Se trata de un intercambio de monedas entre bancos centrales.En este caso, el BCRA le da pesos al Banco Popular de China (BPC), y el BPC le entrega yuanes al BCRA.
“Hasta antes del actual acuerdo, era muy limitado el monto que el Gobierno podía utilizar de loscasi u$s19.000 millones (130.000 millones de yuanes)disponibles: el uso directo de yuanes fue en 2020 y 2021 de sólo el 0,2% del acuerdo, por ejemplo. Esto según balances BCRA, aún sin datos de 2022”, amplió.
Según fuentes del sector financiero, el presidente del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, que también viajó junto a Massa, buscará aumentar el monto disponible del swap desde el límite actual de u$s5.000 millones hasta u$s10.000 millones.
“Si se amplia en u$s5.000 millones, las reservas brutas van a aumentar en u$s5.000 millones. Se pueden usar para importar desde China, o activarlos y cambiarlos por dólares (pagando un pequeño costo)”, opinó Federico Zirulnik.
¿Qué impacto genera el swap en las reservas y el dólar?
Según Manoukian,el BCRA puede otorgar yuanes a importadores de China, “lo que implica que libera divisas para otros fines, al tiempo que es una deuda que el BCRA está incurriendo”.
En definitiva, “esta activación le permite al Gobierno tener un canal más para mostrar que tiene recursos alternativos en medio del severo impacto de la sequía, al tiempo que de funcionar podría darle algo de mayor fluidez a los pagos de importaciones”, amplió.
“Con esto, el BCRA gana poder de fuego para intervenir en los mercados de cambio.Las reservas netas, antes embargo, quedan inalteradas (crece el activo y el pasivo del BCRA por u$s5.000 millones). No obstante, se pueden usar igual”, cerró Zirulnik.