El Gobierno salió rápidamente a festejar el dato que publicó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) este domingo.
Según su medición, en octubre hubo un primer repunte interanual de las ventas minoristas en pymes (del 2,9 %) y en términos mensuales sin estacionalidad el rebote fue del 7,4 %. Sin embargo, el fenómeno no es generalizado. Fuentes del sector adelantaron que en las cadenas de supermercados el mes pasado no dejó recuperación alguna respecto de septiembre y que en la medición interanual podría haberse concretado un desplome récord.
“Se acabó la recesión”, publicó el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, en su cuenta de X al citar el informe de CAME. Javier Milei lo retuiteó. La algarabía radica en que el consumo fue hasta acá el indicador de actividad más esquivo, afectado por la fuerte caída inicial del salario real y por los ajustes de tarifas que redujeron la porción de los ingresos familiares disponible para las compras de bienes de la canasta básica.
La medición de CAME reflejó que, a pesar del rebote, los primeros diez meses del año acumulan un retroceso del 13,2 % respecto del mismo período de 2023 y el 51 % de las empresas encuestadas señaló que su principal obstáculo sigue siendo la falta de ventas. Con todo, su informe arrojó que cuatro de los siete sectores relevados tuvieron una recuperación interanual (alimentos y bebidas, calzado y marroquinería, ferretería y materiales de la construcción, y textil e indumentaria).