El norte del país es la región más complicada por la problemática. Los productores, contratistas y transportistas son los sectores perjudicados por el faltante, que impacta en la producción de granos, pero también en las economías regionales.
Se agrava el faltante del gasoil en el interior del país, en pleno desarrollo de la cosecha de soja y maíz, los dos principales complejos que aportan los dólares a la economía nacional a través de sus exportaciones. Una problemática que también afecta a las economías regionales y complica el inicio de la próxima siembra de los cultivos de invierno, como trigo y cebada. El panorama sigue siendo complejo para productores, contratistas rurales y transportistas.
Según el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, hasta el momento se ha cosechado el 77,6 % del área sembrada con soja, y por otro lado la trilla de maíz se concentra en el centro y sur del área agrícola nacional, y ya alcanzó 27,4 % del área apta en todo el país. Se proyecta que entre ambos cultivos aporten una producción total de 91 millones de toneladas, en un contexto de buen escenario de precios internacionales que provocarán un ingreso récord de divisas al país.
Martin Borbea Antelo, Presidente de la Primera Asociación Empresaria Transporte Automotor de Cargas (Pateac), comentó a este medio continúan los problemas de abastecimiento de gasoil, generalmente en las zonas agro productivas, pero también se está registrando un gran faltante de en el norte del país, como en Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Jujuy y Misiones. Sobre la situación en la última provincia mencionada, el dirigente recordó que al aumento de demanda que existe actualmente, se suman las compras que realizan los transportistas de Brasil y Paraguay, ya que les resulta más barato.
“En el norte del país se tarda un día o día y medio para cargar. En algunas estaciones no hay gasoil y los camioneros se quedan a esperar a que llegue el camión con el combustible, que a veces está cargado a la mitad o solamente trae 5.000 litros, que no llega a abastecer a todos. A esto hay que sumarle que muchos aumentaron los precios. Siempre hay una diferencia entre la capital y el resto del país, pero la diferencia actual es mucho más importante. El gasoil se está vendiendo entre 200 y 220 pesos el litro”, comentó Antelo.
El titular de Pateac recordó que hoy el sector de los transportistas enfrenta un momento de reducción de la oferta, y un incremento en la demanda, porque la actividad hoy está por encima de la de 2019. A todo esto, según pudo saber este medio, en la provincia de Tucumán las ventas que se realizan es por un determinado monto, donde lo máximo q cargan en la ciudad es $5.000, mientras que en el interior se carga hasta $3000. Actualmente es un momento de mucha demanda, con la cosecha de soja, caña de azúcar y citrus, a lo que se suma que en los próximos días comenzará la cosecha de maíz y la siembra de trigo.
Ayer, la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) volvió denunciar la “insostenible situación por el faltante de combustible”.
“Entendemos que no es un problema fácil de resolver, en el que hay muchas variables a tener en cuenta, empezando por la guerra en Ucrania, pero como empresarios tenemos que pagar los sueldos y afrontar los crecientes gastos de nuestra actividad en medio de un contexto de absoluta incertidumbre respecto del acceso –y las condiciones económicas en las que lo haremos- a un insumo clave como es el combustible”, dijo Roberto Guarnieri, presidente de Fadeeac.
Encuesta
Una encuesta realizada por la Federación que agrupa a 4.400 empresas de todo el país, reflejó que sólo uno de cada tres transportistas puede cargar combustible sin restricciones, cupos ni sobreprecios. A partir de este trabajo la entidad confeccionó un “Mapa de abastecimiento de gasoil” a la manera de un semáforo que pone provincias en rojo, amarillo o verde según el grado de acceso al combustible que consiguen los transportistas.
Del total de transportistas encuestados solo un 33% dijo que pudo cargar combustible sin ningún tipo de restricción; el 57% aseguró que carga combustible con limitaciones o cupos al llegar al surtidor y el 10% dijo que no pudo cargar nada. En este último grupo se encuentran los cientos de camiones varados en las rutas en las cercanías de las estaciones de servicio en distintos lugares del país.
Por último, la encuesta determinó que las provincias con mayores dificultades para cargar combustible son Tucumán y La Rioja, con “muy bajo o nulo suministro”, y quedaron en rojo en el semáforo de Fadeeac. Mientras que Misiones, Chaco y Santiago del Estero registraron un promedio de carga muy escaso, inferior a los 20 litros. Y Mendoza, San Juan, Salta y Jujuy, la carga promedio fue entre 21 y 50 litros.