El índice de Hong Kong cerró hoy con una caída de 5,72 %, continuando con una tendencia a la baja.
Los presuntos vínculos de China en materia financiera y armamentística con Rusia por la guerra en Ucrania, y la persistente preocupación por las regulaciones, provocaron hoy una jornada negra en las acciones cotizadas en bolsa de las empresas chinas.
El índice de Hong Kong (Hang Seng) cerró hoy con una caída de 5,72%, continuando la tendencia de ayer cuando cerró 4,97% a la baja; mientras que las bolsas de Shanghai y Shenzhen retrocedieron 4,95% y 4,55%, respectivamente, según la agencia Bloomberg.
La caída de hoy en Hong Kong fue la mayor desde julio de 2015, mientras que, si se tienen en cuenta únicamente a los papeles chinos que cotizan en dicha bolsa, el desplome fue del 6,6%, un nivel comparable con los que se registraron en la crisis financiera de 2008.
Motivos
Entre los motivos de las pérdidas, se señala la preocupación de los inversores por la presunta conexión de China con Rusia en el marco de la invasión de esta última a Ucrania.
Diversos periódicos como el Washington Post y el New York Times difundieron el último fin de semana que Rusia habría pedido a China equipamiento militar y asistencia económica para hacer frente a la guerra.
Sin embargo, Beijing desmintió dichas versiones y el vocero del Gobierno de Xi Jinping, Zhao Lijian las calificó como “desinformación”.
Al temor por los posibles vínculos de China con Rusia que podría derivar, se añade la creciente regulación del país sobre diversos sectores de la economía, como el tecnológico, que motivó que el conjunto de empresas que cotizan en el Nasdaq estadounidense perdieran US$ 1,1 billones durante el año pasado.
Además de la regulación de su país de origen, las compañías se enfrentan a un posible retiro de sus papeles en Wall Street.
Auditorías
La semana pasada, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) nombró cinco empresas chinas a las que amenazó con retirarlas de los mercados bursátiles por no cumplir con los requisitos de auditoria, lo que generó pánico entre los inversionistas.
La SEC acusó a las empresas de no adherirse a la Ley de Responsabilidad de las Empresas Extranjeras, que le otorga a la entidad reguladora la capacidad de expulsar de las bolsas a las firmas que no permiten que los organismos de control de Estados Unidos inspeccionen sus auditorias financieras.
Sin embargo, las empresas chinas se ven en una encrucijada ya que el Gobierno de Beijing prohíbe que desde el extranjero controlen las auditorias de las firmas locales.
Toda la situación derivó a que el banco JP Morgan redujera ayer la calificación de las acciones de gigantes tecnológicos como Alibaba y JD.com.
“Debido a los crecientes riesgos geopolíticos y macroeconómicos, creemos que un gran numero de inversores globales se encuentran en el proceso de reducir su exposición al sector de internet de China, lo cual provoca significantes fugas de fondos del sector”, señaló un análisis de la entidad difundido por Bloomberg.
Tasas de interés
Otro factor que impulsaron las pérdidas de los papeles chinos, fue la decisión del Banco Central de China de mantener sin modificaciones sus tasas de interés de referencia.
La gran mayoría de los economistas esperaba un recorte de dichas tasas para estimular una economía china que muestra signos de ralentización que podría agravarse por el rebrote de coronavirus que afectó al país en los últimos días, y que ya provocó masivos confinamientos.
En lugar de ello, la entidad monetaria decidió inyectar un total de US$ 15.700 millones al sistema financiero.
Fuente: Télam