Los combustibles aumentaron un 3 % y el litro de súper de la petrolera de bandera quedó por encima de los $ 1.100. En lo que va del año, los valores se incrementaron en 126 %.
Tal como estaba anunciado, desde ayer rigen los nuevos precios del combustible, con una suba del 3 % promedio. El incremento incluye el traslado al precio final de la devaluación mensual del peso frente al dólar oficial, del 2 %, y una actualización de solo el 1 % en el impuesto a los combustibles líquidos (ICL).
Los nuevos precios de YPF quedaron en $ 1.104, la nafta súper; $ 1.344, la Infinia, mientras que el diésel e Infinia diésel se ubicaron en $ 1.174 y $ 1.410 respectivamente.
En tanto, la súper en Shell quedó en $ 1.132; la V Power, en $ 1.387; la Fórmula diésel, $ 1.209 y el V Power diésel, $ 1.441.
Por su parte, Puma Súper se ubicó en $ 1.104; la Max Premium en $ 1.351; el diésel en $ 1.179 y el Ion diésel, en $ 1.431.

Así, para llenar el tanque de un vehículo estándar se necesitará al menos $ 73.000.
Esta suba se da en un contexto de caída de ventas. En junio, la baja fue del 12,05 % interanual y resultó más pronunciada que la de mayo, cuando la merma en los surtidores había sido del 8 %, según datos de la Secretaría de Energía de la Nación.
En este contexto, la variante menos consumida por los automovilistas sigue siendo la nafta premium, la de mayor valor. En junio, el volumen de ventas se desplomó en todas las variantes de combustibles: en el gasoil, la caída fue del 16,72 % y en las de diésel, de 9,04 %. En tanto, en el segmento de las naftas, la súper cayó 6,27 % y la premium registró una caída del 20,61 %.
En el año, los combustibles subieron más del 126 % promedio, por encima de la inflación. Producto de la recesión, hay una fuerte caída en naftas premium.