Hacer negocios es fácil, solo hay que comprar barato y vender caro…. Esta es una frase que solemos escuchar mucho los asesores de pymes en el interior de nuestro país.
Entonces… ¿Qué marca la diferencia? ¿Por qué es tan repetida esa frase que aquel que la dice parecería tener razón? Lo cierto es que hay algo que distingue a ciertas pymes logrando que perduren y, eso, lo marca lo intangible. Lo que realmente es esencial a las empresas.
El quiosco del barrio, que tiene la misma mercadería que el de la vuelta de la esquina, pero tiene un atributo imperceptible al ojo humano pero valorado por sus vecinos, logrando que lo elijan a él y no a su competidor.
Ese algo es el modelo de negocios. Eso que hace que una pyme compre barato y venda caro permanentemente. El modelo de negocios es la forma de pensar un emprendimiento que se orienta a un cliente objetivo y explica cómo distinguirlo en un mercado donde todos quieren ser distintos.
Esta herramienta es aplicable desde las pymes del agro como a las profesiones tradicionales que brindan servicios totalmente intangibles.
El modelo de negocios es tan invisible como valorado por el público. ¿Qué hace que elijamos a un abogado sobre otro? ¿Solo la factura de sus honorarios? ¿O la confianza y reputación del jurista ayuda? Si esos atributos fueron trabajados explícitamente por el profesional, hay modelo de negocios.
Una pyme con un modelo de negocios planteado logra hacerse un camino exclusivo, donde su competidor no puede llegar, ya que esta herramienta, implementada de manera correcta, es exclusiva de cada empresa.
Entonces, paradójicamente, del mito disparador de esta nota, nos vamos a una realidad: los productos que más intangibles brinden, son más valorados por los clientes. Y los servicios que más aspectos tangibles muestren, también.
La manera de lograr esto es desarrollando un modelo de negocios flexible y sostenible en el tiempo a la vez.
Es tan simple como contradictorio y, para entenderlo, hacen falta conocimientos específicos y a veces complejos. Por eso es que hacer negocios no es tan fácil. Y allí está el desafío de las pymes. Porque lo esencial puede ser invisible a los ojos pero es lo que diferencia una pyme de otra.