Las acciones de las grandes tecnológicas en la actualidad registran una notable debilidad en el mercado mundial.
Las empresas Amazon, Facebook, Alphabet (google), Netflix, están sufriendo debilidad en los mercados. En la actualidad evidencian signos en rojo, debido a que las acciones mundiales volvieron a caer por tercer día consecutivo.
En tanto, el rendimiento de los bonos y las medidas de expectativas inflacionarias en ambas partes del Atlántico aumentaban en medio de la ansiedad sobre cuándo podrían subir las tasas de interés los bancos centrales.
El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años llegó al 1,5444%, su nivel más alto desde el 17 de junio, impulsando al alza el retorno de la deuda de la zona euro. El rendimiento de las notas a dos años tocó máximos de 18 meses.
Una medida del mercado de expectativas inflacionarias para la zona euro saltó al 1,8308%, su cota más elevada desde 2015. El retorno de la deuda del Tesoro protegida contra la inflación (TIPS) a 10 años subió al -0,82%, su máximo desde fines de junio.
“La liquidación de los mercados de bonos está relacionada con la interpretación por parte de los mercados de que los recientes comunicados de la Fed y del Banco de Inglaterra son más estrictos en relación al cronograma de alza de tasas”, dijo Sarah Hewin, de Standard Chartered Bank. “Los comentarios de ayer de Powell parecen indicar más nerviosismo sobre la inflación, impactando en el rendimiento de los bonos”.
El aumento de los rendimientos presionaba a las acciones tecnológicas de alto crecimiento en las operaciones europeas, mientras que nuevas señales de una desaceleración de la economía china también afectaban a la confianza de los inversores, haciendo caer más de un 1% al índice paneuropeo STOXX 600.
El índice FTSE 100 británico cedía un 0,6%; el DAX alemán perdía más de un 1%; el CAC 40 francés caía un 1,6%; y el FTSE MIB italiano restaba un 1,2%. Los futuros E-mini del S&P 500 bajaban un 0,9%, indicando una apertura a la baja más tarde en Wall Street.
El aumento de los rendimientos impulsaba también al dólar, cuyo índice que compara su fortaleza con otras monedas trepaba a un máximo de cinco semanas. El yen se depreciaba frente al billete verde y el euro, mientras que el alza de los retornos hacía las monedas más atractivas a los compradores japoneses.
Más temprano en Asia, las acciones operaron dispares, debido a que los efectos colaterales de la crisis de deuda de la firma inmobiliaria china Evergrande y la creciente escasez energética en China afectaban a la confianza.
El índice de acciones destacadas chinas CSI300 subió un 0,1% y el Hang Seng de Hong Kong ganó un 1,34%, poniendo fin a una racha reciente se sesiones negativas.
Durante las operaciones asiáticas, el barril de crudo Brent alcanzó los 80 dólares por vez primera en tres años, impulsado por el comienzo de la reapertura de las economías regionales en medio de la pandemia del COVID-19 y preocupaciones de suministro.
Los precios del oro caían a un mínimo de un mes y medio y el oro al contado tocaba su mínimo desde el 11 de agosto, a 1.735,40 dólares la onza.