De acuerdo a la Fundación ProTejer, la Argentina tiene “un potencial muy fuerte”. Y si bien entre 2015 y 2019 “se perdieron 25 mil puestos de trabajo y hubo un crecimiento de la informalidad”, este año hubo una creación neta de 2.500 puestos en la industria textil.
La industria textil en la Argentina transita este año una recuperación de la producción a niveles prepandemia, con una inversión anual proyectada de US$ 200 millones en bienes de capital, al tiempo que enfrenta aumentos de costos y caída en el consumo de indumentaria, de acuerdo con un informe presentado este miércoles por Fundación ProTejer.
“Hoy en la Argentina los textiles estamos creciendo por las políticas y las correctas decisiones”, afirmó el presidente de la Fundación, Yeal Kim, al presentar el informe a la prensa en un encuentro previo a la jornada Pro Textil 2021 que se realizará por la tarde en Pilar, con empresarios y funcionarios del sector industrial.
Kim comparó el desarrollo de la industria textil en Corea del Sur que se dio entre las décadas de los 50 y 90, y consideró que la Argentina tiene “un potencial muy fuerte” para desarrollar el sector, pero que debería crecer en la escala de producción y avanzar en el valor agregado en la producción.
Por su parte la economista jefa de la Fundación, Priscila Makari, señaló que, en el período que fue entre 2016 y 2019, la cadena textil atravesó una crisis debido a la apertura comercial, el desaliento a la producción, la rentabilidad financiera de corto plazo y la pérdida de poder adquisitivo que derivó en una crisis industrial y social.
En este sentido, en referencia a lo sucedido con el sector durante la gestión presidencial de Mauricio Macri, sostuvo que “se perdieron 25 mil puestos de trabajo registrado en 2019 respecto de 2015 y hubo un crecimiento de la informalidad”.
En este punto, subrayó que, luego, “la pandemia profundizó esta crisis del sector”, mientras que en el último año hubo una creación neta de 2.500 puestos de trabajo en la industria textil y una pérdida de 4.800 puestos en el sector de la indumentaria. En ese contexto, aseguró que este año “hay signos positivos de recuperación y a futuro”, dado que “la economía viene recuperándose trimestre a trimestre, siendo la inversión el componente que más creció”.
De todos modos, advirtió que “el consumo privado está siete puntos por debajo del nivel de 2019”, por lo que el sector espera “medidas con esa orientación para generar empleo genuino y lograr una mejora en el poder adquisitivo”.
Las inversiones en los primeros nueve meses del año alcanzaron niveles similares a todo el año 2015 y crecieron 94% respecto de 2020, con lo cual la capacidad instalada de la industria textil se situó 2,7 puntos porcentuales por encima del mismo período de 2019.
Fuente: Télam