El Banco Central inició desde el arranque de la gestión presidencial de Javier Milei un intenso proceso de compras de divisas en el mercado mayorista, con un saldo a favor por esta intervención cambiaria se aproxima a los USD 11.000 millones en poco más de tres meses, que permitió contabilizar reservas brutas por más de 28.000 millones de dólares.
L as reservas internacionales mejoraron desde el 10 de diciembre en unos USD 7.000 millones, un crecimiento importante, pero a menor velocidad que el aumento de los pasivos remunerados en el balance del BCRA, que en cierta forma son la “contracara” de la acumulación de activos en divisas.
El estado del pasivo no es un tema resuelto y también retomó la senda expansiva una vez efectuado el salto discreto del tipo de cambio el 13 de diciembre.
De hecho, los pasivos remunerados, al sumar su stock tanto en pesos como en dólares, aumentaron por el equivalente a USD 10.800 millones en poco más de tres meses, según lo reflejan los datos de la entidad monetaria.
El 7 de diciembre de 2023 los pasivos remunerados sumaban $21.516.576 millones (Pases pasivos más Letras de Liquidez -Leliq- y Notas del BCRA -Nobac) más USD 5.051 millones en Lediv (Letras Internas del BCRA en dólares liquidables en pesos atadas a la evolución del tipo de cambio oficial).
Todos esos conceptos totalizaban unos USD 64.096 millones al tipo de cambio oficial de $364,41, según la comunicación A3500 del BCRA.
El 13 de diciembre los pasivos remunerados contabilizaban $24.404.144 millones y USD 4.913 millones, respectivamente, por un total equivalente a USD 35.420 millones tras el salto que llevó al dólar mayorista a $799,95. Esta notoria baja se dio por la “licuación” inmediata del peso que afectó a numerosas variables de la economía.
En este punto, el paso del tiempo le juega en contra a las cuentas del Central, pues la lenta devaluación –crawling peg del 2% mensual- más un aumento de la deuda en dólares en el balance por la colocación del Bopreal (Bono para la Reconstrucción de una Argentina Libre), para regularizar los compromisos asumidos por los importadores con proveedores del exterior, neutralizan la mejora en el activo por la compra de divisas en el mercado de cambios.
Hay que recordar que los pasivos del BCRA en pesos remuneran según la tasa de política monetaria, que se recortó el 12 de marzo al 80% nominal anual, desde 100% anual anterior.
Así, al 18 de marzo el stock de Pases y Nobac -ya disueltas las Leliq- sumaba $31.678.771 millones, y el de los pasivos en dólares (Bopreal y remanente de Lediv) alcanzaba a USD 9.012 millones, totalizando USD 46.171 millones al tipo de cambio oficial. Esto es un aumento de USD 10.751 millones desde el día posterior a la devaluación del 13 de diciembre.
Por otra parte, el BCRA compró en el Mercado Único y Libre de Cambios un total de USD 10.677 millones entre el 13 de diciembre y el 18 de marzo, mientras que las reservas brutas ascendieron en ese lapso en USD 7.258 millones. De esta forma, la entidad monetaria reabsorbe con títulos de deuda los pesos que emite para comprar divisas en el mercado de contado, movimiento contable que explica la estabilidad de la base monetaria y el efecto fuertemente contractivo -en términos reales- contra una inflación acumulada de más del 70 por ciento.
Los expertos de Consultatio Financial Services destacaron que “al descomprimir el exceso de oferta de pesos -primaria y secundaria- todas estas medidas contribuyen positivamente a acelerar la salida del cepo y, así, a la normalización de las tasas de interés en términos reales. Sin embargo, no vemos esto como un resultado inmediato, a pesar de la voluntad que el Gobierno expresa en este sentido. Como bien señaló el Presidente, para dar ese paso haría falta un stock de reservas bastante más alto -USD 15.000 millones en la estimación de Javier Milei- que tardará un tiempo en ser acumulado vía compras u obtenido vía préstamos -nuevo acuerdo FMI, financiamiento de mercado-”.
El analista Salvador Di Stefano aportó que “en tres meses la base monetaria aumentó muy poco, es más, la circulación monetaria pasó de $6,6 billones a $7,8 billones, con una suba del 14,7%, mientras que entre diciembre y febrero la inflación fue del 71,3%. Esto muestra la caída del poder adquisitivo del dinero en circulación. La licuadora también funcionó con las Letras del Banco Central, ya que subieron el 46,9%, mientras que el stock de deuda en dólares aumentó un 70% en moneda dura, y más que la inflación en pesos”.
Clave: la baja de las tasas de interés
El Banco Central anunció en marzo una serie de medidas que incluyeron la baja en la tasa de política monetaria de 100% a 80% Nominal Anual -esto es pasar de 8,33% de Tasa Efectiva Mensual a 6,67%-, la eliminación de la tasa mínima de plazo fijo de 110% nominal anual y el fin de la operatoria de pases pasivos para los Fondos Comunes de Inversión a partir del 18 de marzo.
“Esto profundiza la licuación de los pasivos remunerados del BCRA reduciendo la emisión endógena por alrededor de $530.000 millones, lo que representa 5% de la base monetaria, dado la baja en los rendimientos de los pasivos remunerados a 80% nominal anual, y en los plazos fijos que actualmente ofrecen una tasa de 75%”, resalta un informe del Grupo IEB (Invertir en Bolsa).
“El resultado alentador del canje de deuda del Tesoro permite ser optimistas sobre la normalización del mercado cambiario ya que uno de los problemas es que esto afectará la demanda de los bonos en pesos, por lo que la operación facilitaría la salida del cepo. La rebaja en la tasa de política monetaria va en la misma línea ya que permite acelerar la licuación de los pasivos remunerados del BCRA al disminuir la emisión endógena. Además, el BCRA viene recomponiendo reservas de manera acelerada con compras en el MULC desde el comienzo de esta gestión superiores a USD 10.000 millones, con reservas netas que ya se ubican en menos USD 4.000 millones, desde los negativas en USD 11.000 millones que recibieron”, precisaron desde el Grupo IEB.
Los expertos de GMA Capital observaron que “en lo que a stock de pesos se refiere, el verdadero desafío está en disminuir el acervo de Pases del BCRA. Los bancos tienen deuda cuasifiscal por USD 35.000 millones con una duración de un día. Sin cambios en montos y/o plazos, la estabilidad financiera sin cepo es una alquimia”.
“Con una brecha que rozó el 20%, favorecida por la oferta comercial de divisas por el esquema blend, más de uno soñó con una salida rápida del cepo. Sin embargo, el manual de las autoridades económicas señalaría que aún sería demasiado temprano. El saneamiento del balance del Central sigue al tope de las prioridades”, agregaron desde GMA Capital.
Por otra parte. el Banco Central finalizó el jueves 14 la tercera subasta de la Serie 3 de los Bopreal, para adjudicar unos 100 millones en valor nominal. Se trató del monto más bajo de las tres colocaciones que hizo hasta ahora para el último tramo del título que diseñó para canalizar parte del stock de deuda comercial acumulado durante la gestión de Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía durante la administración de Alberto Fernández.
De esta forma, el monto acumulado de esta especie es de USD 892 millones, el 30% del total previsto. Las próximas semanas habrá nuevas licitaciones hasta completar el monto máximo de 3.000 millones de dólares. Hay que recordar que El BCRA colocó la totalidad de la Serie 1 del Bopreal por USD 5.000 millones, y de la Serie 2, por 2.000 millones de dólares.
Fuente: Infobae.