Una propuesta ofrecida en la cartera de la consultora chaqueña Catalaxia aporta una manera eficaz de ingresar al mundo de las finanzas personales. En esta nota te contamos las ventajas de colocar parte de tus ahorros en algunos instrumentos que operan en el mercado de capitales.
En la actualidad existen varias opciones para hacer rendir nuestro dinero, que se ofrecen dado la baja en las tasas de interés que ofrece el sistema bancario en los plazos fijos. Lo cual hace que los ahorristas comiencen a explorar posibilidades más seductoras para colocar allí sus fondos.
Inversor Digital dialogó con Federico Meyer, asesor del primer agente global de inversiones del nordeste, Catalaxia, matrícula Nº1718 CNV. “Cada centavo de interés ganado se convierte en capital para generar aún más ganancias. Entender cómo funcionar el interés compuesto nos provee de una herramienta muy útil para empezar a construir nuestro propio plan de ahorro”, asegura.
– Inversor Digital: ¿En qué consiste el interés compuesto?
– Federico Meyer: Se trata de un importante concepto del mundo de las finanzas y en las redes sociales solemos escucharlo como la solución a los problemas de ahorro.
Antes de ir al desarrollo de esa temática tengo que hablar del concepto de capitalización de intereses o, en otras palabras, que el interés se transforma en capital (cuando hablamos de interés compuesto).
Por ejemplo: imaginemos que contamos con un ahorro de 1000 dólares y decidimos prestarlo a un conocido. Esta persona nos promete devolverlo dentro de 180 días, más un extra de 50 dólares en concepto de interés. En definitiva, lo que nos está prometiendo es que dentro de 180 días vamos a cobrar 1.050 dólares, 1000 por el capital que prestamos y 50 por el interés que nos prometió.
Imaginemos que llegamos al día 180 y esta persona nos propone posponer el pago de los 1.050 por otro semestre y nos promete 5% de interés. Lo que implica que, dentro de 180 días más estaremos recibiendo 1.102,50 dólares. Compuesto de los 1.050 que no cobramos y 52,50 dólares extra por el interés que nos está prometiendo nuevamente. En este punto ya estamos en condiciones de identificar el interés que se convierte en capital, es decir esos $50 que corresponden al interés que ganamos en la primera operación.
Recordemos, repasando el ejemplo, que esos 50 dólares no los cobramos al día 180, porque la persona nos propuso posponer el pago y nosotros aceptamos. Son estos 50 dólares más los 1000 anteriores, los que ahora se componen el nuevo capital durante la segunda operación y sobre los que se calcula el nuevo interés que nos han prometido. Pasando en limpio, entre las dos operaciones estaremos cobrando 1.102,50 dólares.
– Es lo que se conoce en la jerga como un acuerdo win-win…
– Yendo a la propuesta que tenemos desde Catalaxia… Si este tipo de operaciones las repetimos asiduamente continuamos ese círculo virtuoso en el que el interés se transforma en capital.
Mirando al largo plazo, y tomando como ejemplo un monto inicial de 1000 dólares, si tenemos paciencia y nos mantenemos ahorrando durante 15 años hacia el final del período tendríamos un ahorro de 4.320 dólares, aproximadamente. En tanto, si elegimos hacer estas operaciones durante 30 años ese capital inicial crecería hasta los 16.800 dólares (estimadamente).
– ¿Es posible salir de la coyuntura abrumadora y apostar al largo plazo?
– Trabajamos diariamente para mostrar a nuestros clientes y a las personas que nos contactan porque quieren hacer rendir su dinero. Parte de lo que hacemos es justamente mostrarles que no se agotan las posibilidades tras un anuncio gubernamental, el cambio de legislación o alguna racha en los mercados.
Lo que buscamos es que las personas puedan comprobar que hay opciones que estudiamos con un grupo de especialistas en mercados financieros, para recomendarles carteras que les van a dar rendimientos fijos en dólares. Los cuales les van a permitir no solo ganarle a la inflación, sino hacer crecer su capital a lo largo del tiempo.
Por Marcelo López.