El impacto de la devaluación en los sueldos de los jubilados y pensionados, parece pasar desapercibido en la agendas de los medios de comunicación, en las agendas de los candidatos a presidente y sobre todo las responsabilidades que le caben al presidente de la Nación, Alberto Fernández y al Ministro de Economía, y candidato a presidente Sergio Massa.
La economía argentina ha enfrentado desafíos significativos en las últimas décadas, incluyendo la volatilidad en el valor de su moneda, el peso argentino y las consecuencias en la inflación.
No escuche a nadie preocupado por los viejos que cobran la mínima y que deben elegir entre comprar remedio o comer, ni hablar de la atención médica, donde la mayoría de los especialistas cobran “coseguros”.
Impacto en los sueldos de jubilados y pensionados
La devaluación del peso argentino tiene un impacto directo en los sueldos de los jubilados y pensionados. Argentina tiene casi siete millones de jubilados y pensionados, donde la gran mayoría cobra el salario mínimo, cualquier depreciación en el valor del peso conduce a una disminución real en el poder adquisitivo de los beneficiarios.
Esto genera dificultades financieras, especialmente para cubrir sus necesidades básicas, de alimentación, vivienda, salud, de recreación mejor ni hablemos. Por otra parte, no pueden hacer como muchos de nosotros, de trabajar en algo extra para llegar a fin de mes, ya sea por condiciones físicas o falta de oportunidades laborales para este sector de la población.
Recordemos que las jubilaciones mínimas están en $87.459,76, más el bono “refuerzo previsional” de $37.000, medida extraordinaria hasta el mes de noviembre.
Se acuerdan de Norma Plá, ella en la época del Ministro de Economía Domingo Caballo pedía que las jubilaciones tengan un equivalente a US$450 dólares y ahora en la actualidad no llega ni a US$100 dólares con el refuerzo previsional incluido (tomando de referencia el informal, porque el oficial es muy difícil de adquirir).
Hablando en términos de poder adquisitivo, en el año 1997, un jubilado cobraba $150 pesos y le alcanzaba para 220 litros de leche entera en sachet, ($0,68 el litro), llegamos a 2023, sueldo $87.459,76, el litro de leche a $450, sólo podrían comprar unos 194 litros de leche, más o menos.
En el devenir de los años la lucha de Norma Plá, por salarios dignos sigue más vigente que nunca, haciendo éste cálculo, pueden comprar 26 litros menos de leche, comparando con lo que ganaban en 1997. Insisto en no sumar el refuerzo, porque no se sabe qué pasará luego de noviembre y pasada las elecciones.
Responsabilidades del presidente de la Nación
El presidente de la Nación, Alberto Fernández tiene la responsabilidad de establecer políticas económicas que estabilicen la moneda y protejan el bienestar de los ciudadanos, especialmente a los jubilados y pensionados. Esto implica trabajar en medidas que mitiguen el impacto negativo de la devaluación en los sectores vulnerables de la sociedad, como los jubilados.
El gobierno puede considerar aumentar las pensiones de manera proporcional a la inflación para contrarrestar el efecto de la devaluación en el poder adquisitivo de los beneficiarios. Se supone que para eso estaba el Fondo de Garantía y Sustentabilidad que el mismo Ministro de Economía Sergio Massa, tomo en su momento, para estabilizar el mercado cambiario y hoy tenemos un dólar informal por encima de los $1000, pesos.
Como periodista especializada en Derecho de la Vejez no puedo permanecer indiferente y es mi deber hacer notar, que la devaluación del peso argentino, la corrida cambiaria y la inflación, sumergen en la pobreza a miles de argentinos que cobran la jubilación mínima, ellos fueron nuestros docentes, comerciantes, enfermeros, etc. Se merecen vivir con dignidad.
El gobierno, encabezado por el presidente de la Nación, Alberto Fernández y con la orientación del Ministro de Economía, Sergio Massa, tiene la responsabilidad de implementar políticas económicas que protejan a los ciudadanos más vulnerables.
En este contexto, es esencial tomar medidas proactivas para mitigar el impacto negativo de la devaluación en los ingresos de los jubilados y pensionados, asegurando así un nivel de vida digno para los sectores más vulnerables de la sociedad argentina, como lo establece la Convención Interamericana de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, con rango Constitucional, Ley Nac. 27700/22.
Es responsabilidad de todos, trabajar por una sociedad justa y solidaria, llegar a ser una persona anciana, es una cuestión de tiempo y todos nos merecemos vivir plenamente, lo que nos reste de vida.
* La autora es periodista, especializada en Derecho de la Vejez.