Con la intención de fortalecer el acceso educativo para jóvenes en edad escolar, el BID confirmó un nuevo desembolso para la Argentina.
Ya sea para programas de salud, asistencia financiera por la sequía, obras de infraestructura o fortalecimiento de la inclusión de la discapacidad, la agenda en conjunto entre el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Argentina se consolidó a raíz del vínculo que estrechó Sergio Massa con sus principales autoridades.
Este jueves, el organismo financiero presidido por el israelí Ilan Goldfajn aprobó un nuevo crédito de 150 millones de dólares para Argentina, en el marco del programa de Préstamos Basados en Resultados del BID. Este está orientado a fortalecer específicamente las trayectorias educativas de niños, niñas y jóvenes de la provincia de Buenos Aires.

El objetivo del desembolso es trabajar en el desarrollo de programas para mejorar el acceso a oportunidades educativas y a una alimentación escolar saludable para jóvenes que se encuentran en contextos de vulnerabilidad y asisten a escuelas de gestión estatal de la provincia de Buenos Aires.
Esta misma semana, el BID había aprobado un préstamo por 265 millones de dólares orientado a incrementar y fortalecer los niveles de inclusión de las personas con discapacidad en todo el país. Además, se buscó potenciar la capacidad de la Agencia Nacional de Discapacidad como el principal organismo de aplicación mediante herramientas de apoyo que permitirán fomentar la transversalidad de las perspectivas de integración de las personas con discapacidad tanto en el ámbito privado como en el público.