Tras derrumbarse hasta 8% en la primera semana del año, los bonos soberanos en dólares cayeron hasta 3,7% este lunes, en medio de las diferencias entre el Gobierno y el FMI sobre el sendero fiscal que debe seguir Argentina.
Tras derrumbarse hasta 8% en la primera semana del año, los bonos soberanos en dólares extendieron pérdidas este lunes, afectados por las dudas en torno al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los títulos surgidos del canje de deuda con acreedores privados realizado en 2020 sufrieron bajas de hasta 3,7% en esta jornada. De este modo, el Riesgo País, medido por el banco JP Morgan, crecía 1% (17 unidades) hasta los 1.819 puntos básicos, su nivel más alto desde el 1° de diciembre.
Los bonos reaccionaron de forma negativa ante las diferencias entre el Gobierno y el FMI en torno al sendero fiscal que debe seguir Argentina. Desde Casa Rosada buscan que la reducción del déficit fiscal sea gradual, para llegar a un equilibrio en 2027, mientras que desde el organismo pretenden que la corrección sea más veloz, mediante un recorte del gasto en términos reales.
Lea también: Stiglitz: “Alberto Fernández logró un milagro económico”
Donde sí hay acuerdo es en la necesidad de reducir el financiamiento del déficit vía emisión, de combatir a la inflación con varias herramientas (entendiendo su multicausalidad), de tener un tipo de cambio consistente con la capacidad de acumulación de divisas del país, y de tener tasas reales positivas para fomentar el ahorro en moneda doméstica.
Respecto de esto último, el Banco Central (BCRA) ya comenzó a dar señales en esa dirección al incrementar su tasa de referencia al 40% (48,3% en términos efectivos), aunque todavía parece insuficiente para ganarle a una inflación que en 2022 alcanzaría el 54,8% según las consultoras y entidades financieras que participaron del último REM.
Más allá de la incertidumbre alrededor del acuerdo con el Fondo, el Gobierno da señales de querer llegar a un punto medio, a partir de los pagos de intereses realizados en el último tiempo y las declaraciones de funcionarios advirtiendo sobre los riesgos de no acordar.
“Argentina necesita cerrar un acuerdo y al FMI tampoco le conviene un default. Los bonos cotizan a nivel de default, pese a la gran reestructuración de 2020. Se necesita del acuerdo, aunque el país diga que no quiere hacer el ajuste que se le pide”, afirmó el economista Gabriel Caamaño.
Desde InvertirOnline (IOL) remarcaron en diálogo con Ámbito que las tensiones del FMI suelen tener un impacto mayor en los bonos en dólares en comparación con otros activos. En ese sentido, descontando un escenario base de acuerdo, advierten que en el corto plazo habrá mucha volatilidad en los títulos, como ocurrió en otros países, pero que luego del acuerdo los indicadores deberían verse beneficiados.
En las próximas tres semanas vencen unos u$s1.100 millones de la deuda con la institución que conduce Kristalina Georgieva, mientras que en marzo vencen otros u$s2.900 millones.
Fuente: Ámbito